Las momias y sus amuletos

A principios del Imperio Egipcio, únicamente los faraones eran considerados inmortales, por ese motivo era momificado y de esa manera podían mantener su cuerpo en forma incorrupta para otra vida. Con el paso del tiempo algunos nobles adquirieron ese honor, pero se pensaba que no eran enviados hacia el Más Allá.

A través de un análisis que se ha realizado con la ayuda de un scanner a la momia de Seromon por un grupo de investigadores forenses de la Universidad de Besancon (Francia) han descubierto la riqueza de su ajuar funerario.

El cuerpo embalsamado de ese sacerdote y escriba real de la dinastía XXI (siglo X aC) tenia una gran colección de amuletos, entre los que podemos mencionar un escarabajo (símbolo de resurrección en la mitología egipcia) en el pecho. En el abdomen se alojaban cuatro figuras realizadas con cera de abeja que simbolizaban los hijos de Horus y junto al brazo derecho había un ibis, también realizado en cera.
Para completar la colección de reliquias, se encontró un collar con 12 amuletos engarzados y unos ojos de vidrio cuyas cuencas oculares servían para que el difunto tuviera la capacidad de ver en la oscuridad de la vida eterna.

Imagen de la momia de Egipto