Cerveza bondadosa

El deporte del futbol es un deporte de mucha popularidad y que convoca a miles de fanáticos del balón pie. Pero de la misma forma es de todos sabido que un domingo sin futbol, no es domingo, y meramente un partidito de futbol sin cerveza, no es un partido completo. La afición acude a los estadios y a los llanos en las zonas rurales para disfrutar de un soleado partido de futbol, pero no pueden faltar las cervezas bien frías, tanto en el estadio como en el llano.

La cerveza no engorda.
La cerveza no engorda.

 

Aunque no es cuestión de alarmarse amigo lector, pues el consumo de la bebida no es del todo malo, puesto que se ha comprobado en estudios recientes realizados han puesto en alta estima el consumo de la cerveza por parte de los deportistas, que incluso se está buscando que las federaciones acepten la cerveza dentro de la dieta requerida por los atletas. Y no es sólo por comodidad y por echarse una buena “chela” como relax o disfrute, pues el científico estudioso del caso, y también catedrático, Manuel Castillo Garzón Fisiólogo Médico de Granada. Este sujeto ha realizado innumerables aportaciones y comparado estudios respecto al caso de los beneficios de consumir cerveza entre los deportistas. Arrojando resultados satisfactorios, aun por mas “satanizada” que sea esta por sus efectos con los excesos.

¿Por qué es bueno el consumo de la cerveza en los deportistas?

Muy sencillo, sus estudios han dictaminado que, después de la actividad física, el atleta al consumir la cerveza, esta le proporciona suficiente cantidad de carbohidratos que lleva consigo en las malto dextrinas, así mismo proporciona vitaminas y minerales. Este consumo mantiene en el deportista altos niveles de glucosa plasmática, así mismo tiene la facultad de amortiguar todas las respuestas hormonales de estrés, esto a la vez hace que reduzcan las perturbaciones del sistema inmune. Lo mismo que es hidratante para recuperar el líquido perdido en la actividad deportiva.

Entre otras cosas la cerveza nutre de vitamina B, que ayudan en nuestro sistema nervioso, también nos proporciona la vitamina B2, que es indispensable para la ayuda a facilitar la digestión, y la vitamina B1, que es la que se encarga de hacer más fácil  el trabajo metabólico de los glúcidos.  Y aunque tan maña reputación ha rondado alrededor del mundo, el consumo de la cerveza, es benéfico para el trabajo cardiovascular, si se consume con moderación, ya que estadísticamente los que beben cerveza moderadamente, tienen un sesenta por ciento menos de riesgo en padecer ataques al corazón, esto incluso  es un porcentaje menor ante los mismos abstemios.

Contrario a lo que se ha creído, por su contenido de cebada, la cerveza NO engorda, y perdónenme por romper este mito y decir la verdad, pues un estudio reciente ha comprobado que al no contener grasa, que en tan sólo cien mililitros de cerveza se contienen cuarenta y dos calorías. Y sin embargo es la bebida alcohólica que menos alcohol contiene.

He aquí un motivo más para disfrutar moderadamente de una cerveza bien fría, y no abusar de su consumo ya que las atenuantes malas de esta bebida tan bondadosa, han sido por no saber controlar su consumo.

4 comentarios en «Cerveza bondadosa»

  1. Pues en efecto ya tiene años desde este tema y aun hoy en día es la misma discusión, yo opino que ambos tienen razón, el beneficio es bueno pero estamos ablando de un consumo moderado no una adicción, claro que es un producto el cual genera una necesidad de consumirlo pero depende de cada quien ser responsable al tomar yo opino que una después de entrenar o una larga jornada de trabajo es buena pero debemos saber cuando parar y tener fuerza d e voluntad.

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  2. ALCOHOL Y SALUD, NO VAN JUNTOS

    El etanol, uno de los principales componentes de cualquier bebida alcohólica, afecta el sistema nervioso central, causa diferentes tipos de enfermedades, accidentes de tráfico, malos tratos y embarazos no deseados

    El 9,3% de los años potenciales de vida perdidos son atribuibles al consumo de alcohol

    · El mensaje correcto debería ser “no bebas” según declara Ángel Velasco, Presidente de FARE

    Barcelona, 20 de noviembre -. En las últimas fechas están apareciendo diferentes informaciones en relación con supuestos beneficios del consumo de alcohol para la prevención de enfermedades como el cáncer, el alzheimer o efectos indeseados como la deshidratación. Sin embargo, el análisis de los datos de defunciones según la causa de muerte concluye todo lo contrario. Según el Sr. Ángel Velasco, Presidente de la Federación de Alcohólicos Rehabilitados de España (FARE), “Es una vergüenza que se lancen mensajes de este tipo a la opinión pública. Son mensajes que se apartan totalmente de la realidad. El alcohol perjudica gravemente la salud, causa accidentes de tráfico, malos tratos, embarazos no deseados, entre otros”. Y añade “Estos mensajes confunden a los jóvenes y les predisponen al consumo incontrolado de alcohol. El alcohol no es un producto de consumo, es una droga y los medios de comunicación deberían advertir de los peligros asociados”.

    Mortalidad y alcohol

    Lejos de observar que el alcohol puede tener efectos beneficiosos en la salud, el estudio “Mortalidad y mortalidad prematura relacionadas con el consumo de alcohol en España entre 1999 y 2004” publicado el mes pasado en Medicina Clínica, se encarga de confirmar lo contrario, alertando de que el consumo de alcohol es una causa importante en los fallecimientos registrados en nuestro país. En números absolutos, el estudio afirma que el porcentaje de mortalidad atribuible al consumo de alcohol fue del 2,1%.

    Entre los procesos crónicos, dos de cada tres muertes por causas crónicas relacionadas con el consumo de alcohol se debieron a enfermedades del sistema digestivo, y especialmente los procesos cirróticos. Entre los procesos agudos, los accidentes no intencionales, y en particular los accidentes de tráfico (con el 15% del total de muertes atribuibles al alcohol) fueron la principal causa de mortalidad.

    Igualmente, uno de los objetivos del trabajo se centraba en evaluar los efectos del alcohol como causa de mortalidad prematura y los resultados no dejan lugar a la duda. Así, los autores del trabajo aseguran que “el 9,3% de los años potenciales de vida perdidos son atribuibles al alcohol, una cifra cercana a los índices por tabaquismo.

    “Los resultados muestran que el consumo de alcohol es una causa importante de mortalidad y ocasiona una alta mortalidad prematura, y que su posible ‘beneficio’ sobre la mortalidad es ínfimo comparado con el daño que produce”, resume el estudio. De las 51.351 muertes atribuibles al consumo de alcohol que se produjeron en España durante el periodo estudiado, sólo en 17 casos se observa un “retraso” de la mortalidad frente a 51.368 muertes ocasionadas por el consumo de alcohol.

    Rendimiento físico y alcohol

    Se han realizado distintos estudios en relación con los efectos del alcohol y el rendimiento físico en humanos y uno de los más recientes corresponde al American College of Sports Medicine, que determinó que el consumo agudo de alcohol ejerce un efecto negativo sobre la psicomotricidad, como tiempo de reacción, coordinación de ojos y manos, la precisión, el balance y la coordinación.

    El trabajo añade que el alcohol puede disminuir la fuerza, la potencia, la tolerancia muscular local, la velocidad y la tolerancia cardiovascular. Además, concluye: “Se debe educar a deportistas, dirigentes, educadores, médicos, entrenadores, prensa, etc. para que sepan los efectos del consumo del alcohol sobre el rendimiento físico y a las alteraciones agudas y crónicas que se puedan producir”.

    El etanol (uno de los principales componentes de cualquier bebida alcohólica) afecta el sistema nervioso central, provocando euforia, desinhibición, mareos, disminución de la respuesta a los reflejos, somnolencia, alucinaciones, confusión etc. Según añade el estudio citado, el alcohol afecta al complejo de la dopamina en un primer estadio, provocando euforia y pérdida del miedo, único efecto que se podría considerar positivo para el deporte.

    Así pues, el consumo de alcohol mezclado con la práctica de ejercicio físico es una práctica muy desaconsejable después de entrenamientos y partidos. El alcohol favorece la deshidratación, e incluso en grado mínimo (pérdidas equivalentes a un 1% del peso corporal) puede tener un efecto negativo sobre el rendimiento.

    Los profesionales del deporte suelen restringir severamente el consumo de alcohol después de una actividad física, como bien expresa Esteban Vigo, antiguo jugador del F.C. Barcelona y actual entrenador del Xerez Deportivo. “Prohibimos a los jugadores el consumo de alcohol, incluida la cerveza, después de entrenamientos o partidos, y durante las concentraciones. Cualquier médico o nutricionista de un club profesional siempre aconsejará tal disposición”, asegura.

    En definitiva, a médicos, entrenadores, profesores, padres y demás agentes sociales, correspondería ejercer un rol preventivo para favorecer el desarrollo de acciones que promuevan un estilo de vida saludable e informar sobre todos los riesgos para la salud que conlleva el consumo de alcohol. Según Ángel Velasco, esto supone una difícil tarea ya que “hay que luchar contra los intereses económicos de la industria alcoholera, que intentan fomentar el consumo diario de alcohol. El mensaje correcto debería ser “no bebas”.

    Información para prensa:

    Victoria Palomo – IMPACCTA

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